El propósito de la noche era hacer un tributo al fallecido diseñador británico Charles James. El artista de moda ha sido uno de los diseñadores más importantes e innovadores de mediados de este siglo, a pesar de ser una persona discreta y mantener fuera del alcance de los medios y la fama, ha sido siempre muy valorado por actrices, cantantes y alta sociedad de Nueva York. Era un amante de los vestidos de noche, creaba figuras arquitectónicas con sus telas que llegaban a pesar más de diez kilos.
La noche prometía. En las invitaciones ya se había avisado de que los asistentes debían ir “White tie”, es decir, con la máxima etiqueta requerida. Los hombres acudieron con frac y las mujeres con largos vestidos de noche, aunque alguna sí dejó lucir su silueta en ajustados pantalones de vestir con cortos tops. Cada año gala del MET cambia su temática. En 2013 estuvo dedicada al punk y los famosos no dudaron en llevar altas crestas y piercings por todas partes. Este año tocaba la elegancia.
Entre la lista de invitados se encontraban actrices y cara de moda como Anna Wintour, Lupita Nyong’o, Kim Kardashian, Sarah Jessica Parker, Victoria Beckham, Rihanna, Cara Delevingne, Selena Gómez, Beyoncé o Bradley Cooper.
La fiesta cumplía su 41ª edición y la anfitriona era Anna Wintour, la directora de la revista estadounidense Vogue. La periodista acaba de dar nombre al departamento del museo dedicado a la moda “Anna Wintour Costume Institute” y ha presentado la exposición Charles James, Beyond Fashion, que estará abierta al público desde el 8 de mayo al 10 de agosto.
Un evento costoso, al que no todos podían asistir. El cubierto costaba nada menos que 25.000 dólares, el doble que el pasado año, y la entrada tenía que pasar la supervisión de Anna Wintour.
Entre las actrices que pisaron la alfombra se encontraba Sarah Jessica Parker, que fue una de las que mejor interpretó la temática de la gran noche. El espectacular vestido de tonos crema en la parte de la falda y guantes combinados con el top negro del diseñador Óscar de la Renta atrajeron la atención de todos los asistentes. El peinado de la americana consistía en un elaborado moño alto con flor, sin complementos exagerados y un maquillaje más bien discreto resaltando sus impresionantes ojos verdes.
La protagonista de la noche, la directora de la prestigiosa revista de moda Vogue, era Anna Wintour que optó por los colores claros combinados con unas rayas negras fuertes cruzadas de arriba hacia abajo. Un espectacular collar de piedras en colores plata y un peinado liso con flequillo, como normalmente acostumbra.
La reconocida modelo Cara Delevigne innovó con un estilo masculino, algo que ya viene luciendo en varios eventos. Su gran silueta le permite crear una tendencia sexy con lo que se ponga.
Los Beckham fueron otros de los invitados estrellas. Victoria lució un largo vestido blanco de palabra de honor de su colección y David optó por un traje de chaqueta blanca con pajarita.
La actriz Blake Lively que saltó a la fama por la serie “Gossip Girl” lució uno de los vestidos más impresionantes de la alfombra roja, un Gucci en tonos pastel claro con caída y en forma de capa.
Texto y fotografías: Macarena Jiménez
@Macarena4646
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